Temuco, 31 de octubre de 2005
¡Queridos hermanos!

¿Cómo están?, me imagino que con una resaca incontrolable, después de atropellador y rotundo triunfo, qué alegría, la verdad, no sé de quien fue la idea de llamarme, pero se lo agradezco, la magia de la tuna siempre presente. Justo en la tarde le comentaba a Sandra que ya deberían estar “empilándose” para participar del certamen. A la hora que llamaron, acá eran como las 3 a.m. (desde octubre se adelantó a dos horas) así que me despertaron, pero que bueno que no era un sueño, gracias por sus palabras, yo también los extraño mucho, no saben cuanto, hace tanto que no canto, creo que hasta del “Clavelitos” me he olvidado.
Por acá todo mejor, cada vez mejor, me falta convalidar mi título y sé que me irá mucho mejor, desde ya prometo, si es que el trabajo me deja, viajar al próximo CETUL. De tunas no se nada, lo último que hice fue acompañar a Sandra a un pueblo cerca de Temuco, Vilcún creo que debe llamarse, donde coincidentemente estaban invitados los tunos de la UFRO, me llamaron para que los acompañe a tocar un momento, la verdad es que me ha costado “colgar las pantis”, aceptar que estoy próximo a los 30, pero eso si, “nadie me quitara lo bailado”.
En cuanto a mi “exilio”, al comienzo fue difícil, como todo individuo que sale de su lugar de origen (ahora entiendo a la paisana Jacinta), y mucho más si eres peruano, pero ahí lo rico y sabroso de salir, tratar de enmendar la mala imagen que alguno de nuestros compatriotas ha dejado por aquí y por allá, es un trabajo difícil pero no imposible, ya habemos muchos peruanos que estamos en eso. Como les decía me costó encontrar trabajo acá, como en el Perú, el “pituto”, como le dicen a la “vara” acá, esta vigente, así que me fue difícil entrar a alguna empresa forestal y más, cuando ya están muy constituidas y llenas de experiencia. Como les comenté, estuve trabajando con los tíos de Sandra, eso me dio la oportunidad de legalizarme, empezar a sacar mis documentos chilenos, conocer gente del ámbito de la construcción, claro que ahí hice de todo, se podría decir que fui un “pardillo de la obra”, en todo caso la pase muy bien, hicimos asados dando a conocer los brindis típicos de la tuna …extendere, olere, extendere, tomare… claro que después de varias horas de compartir el brindis era reducido criminalmente a …extendere y tomare…; también tocábamos un poco la guitarra y se hicieron famosas así, “Las Adivinanzas” y “Las Moralejas”. En ese tiempo hice de todo, desde verificar la calidad de los trabajos de los trabajadores, hasta martillar aproximadamente unos 500 clavos al día, cargar tableros, hacer papa a la Huacaína, ají de gallina, ¡uf!, no se imaginan, y todo el trabajo con madera en general.
Lamentablemente, no se acordaron bien los precios de la empresa con la contratista de mis jefes y estuvimos con vacaciones forzadas desde junio hasta principios de agosto (aproveche en conocer toda la región y comer lo más que pude, de la gastronomía regional), de ahí paramos hasta comienzos de octubre. Ahora me cambie de trabajo, soy Administrador de Obras Civiles de OGCI Ltda. (Empresa constructora con obras desde la VI hasta la VIII región), lo “malo” es que la obra que administro, está en Liquiñe (carretera internacional a Argentina, X región), que es una mezcla entre Oxapampa, Huaraz y las termas de Cajamarca, o sea, abundan los baños termales, áreas verdes y campos de cultivos. Mi pega (trabajo, como dicen acá), consiste en hacer los contratos, llevar las planillas de sueldo, verificar algunas cotas con el taquímetro, y pasarlos a planos en Autocad, a veces ir con la camioneta a comprar materiales menores y alimentos para las diferentes faenas, informes de consumo de combustible y horas-maquinas para las excavadoras, retroexcavadoras, camiones cargadores frontales, pagos a proveedores, certificados en la inspección del trabajo, etcétera; en resumen, muy relajado el trabajo, aparte que me pagan más y es más estable. Al compadrito que reemplazo no le fue muy bien, así que me dio cabida para mejorar el sistema de trabajo, uno de los requisitos fue tener licencia, así que tuve que decir que sabia manejar(…si nos suena la barriga alguna cosa inventamos…) y justamente el lunes tengo el examen de conducir, ¡¡¡¡¡peligro, Tito al volante!!!!!!, según los críticos, conduzco muy rápido, así que tengo que bajar las revoluciones ya que el camino por allá, en Liquiñe, no es de los mejores.
después de la misa… incluso, desde la otra semana tocaré guitarra en el coro de la iglesia –conexión al cielo- y ella cantará. Su familia muy bien, los aprecio mucho, me saqué la lotería con ellos, imagínense, aguantarme tanto tiempo, si Dios quiere ya desde el otro mes empezaré a alquilar una casa, para que cuando vengan, tengan donde llegar, perdón, a donde llamar.Hermanos, de vez en cuando leo la lista de la tuna y las cartas que a veces me mandan, agradezco los mensaje de texto que en alguna oportunidad me mando Alex, Lolo, Dennis, etcétera, llegaron perfectamente. Me causan mucha gracia las ocurrencias que brotan de sus cerebros, ni que decir los verbos y demás términos que a Melvín se le ocurren (bagrear, alpinchista, etcétera).
Con respecto a los acontecimientos locales, el mas chévere fue el 18 de septiembre, fiestas patrias de Chile, el 17 fue el cumple del tío Juan de Sandra, mi ex-jefe, luego nos fuimos a bailar, para esa fecha se hacen fiestas por todos lados, harto borracho por las calles -sin ofender a mis lectores-, sobre todo abunda la comida, el vino y la chicha de manzana, ni que decir de las empanadas. El 18 nos fuimos al campo de la abuelita de Sandra, el que Mc Cuac y Toro conocen, me habré comido unas 5 empandas, un medio kilo de carne de vacuno y otros tantos 300 gramos de cerdo y un buen plato de Curanto (plato típico del sur de Chile a base de choros, longaniza, pollo y almejas tipo Pachamanca), pero esta vez se hizo a la olla. Después, a volar cometa y tomar vino y/o cerveza hasta el amanecer.
Después de todo lo contado, lo que más hago es reunirme con la familia de Sandra, la pasamos
bien, sus abuelos y tíos son excelentes personas, algunas veces visito al Teco (tuno de la U. de Concepción) que vive -al igual que yo- en Temuco. Hace unos días estuvo el Judas, de derecho de Barcelona por acá, ahora debe estar en Valdivia. Cuando nos reunimos esa hice una “Causa rellena”, acá le dicen “causa limeña”, quedó buena, al menos “se vendió” todo; luego, el tema de sobremesa: los modismos, hasta el día de hoy me acuerdo y me río cuando el Judas dijo que en España a “los Magníficos” ( A Team) le decían: el equipo A ; y a los “Cariñositos” le dicen “los osos amorosos”, eso y otra sarta de pelotudeces.Ahora recuerdo que tengo tantos recuerdos (valga la rebusnancia) buenos con Uds. creo que nunca fui tan feliz –en mi época de estudiante- como con la Tuna Agraria. Espero que la amistad, la complicidad, la hermandad que nos une siga vigente y con más fuerza, que los nuevos valores sepan de la historia de la tuna, de sus integrantes y hasta de su
s bochornos, esos si que abundan, me incluyo dentro de la “Tuna Bochorno”.Recordando, creo que el bochorno mas contundente que tuve, fue cuando fuimos a dar serenata a la -ahora esposa- de Pedrito Romero, estábamos tan borrachos… veníamos de una pollada en la casa del Chino, obviamente, no era una actividad pro-fondos, creo que celebrábamos que era viernes. El día anterior tuvimos una presentación en un colegio al que nos llevo Totito, en el “resaqueable” distrito de San José de Cañete (corrígeme Totito las coordenadas) donde nos hicimos acreedores a unas cuantas garrafas de Pisco y Vino de la zona; Pedro llamaba y llamaba por teléfono para embarcarnos, en lo que esperábamos, “el Chino” mandaba a los pardillos a exprimir naranjas, creo que estaban Henrini (ex-pardillo de notable amistad) y Lolo, hasta que por fin, cuando ya estábamos bien sazonados llego Pedro. No sé en qué momento ni cómo, empezábamos a vernos borrosos y se iba perdiendo la señal, al final llegamos a la casa de su flaca y si no me cuentan al día siguiente, ni me acuerdo dónde tocamos, varios fuimos los heridos; hasta hice el brindis, concluyendo balbuceando con frescura y gracia estudiantil ...hip, hip ¡ah! Cuanto ha que no bebemos y que sed tenemos... , después me encariñe con unos pomos de cerveza que estaban a nuestras espaldas y en honor a la verdad, cerré mis trasmisiones. Días después tuvimos una presentación en el auditorio, con Mc Cuac repartíamos los trípticos de la tuna y una chica(la ahora esposa de Pedro) me dijo: ¿No te acuerdas de mí?, mmm, no –respondí con cara de duda-, a lo que su sobrina (¿cómo se llama?, creo que Marta) intervino: ¿no te acuerdas que vomitaste mi baño? ¡Que!, pucha ¡que bochorno!, no sabía dónde meterme, sólo me quedó mostrar una sonrisa en señal de un sincero, me cagaste.
No sé qué fuerza nos hace venir a la Tuna, qué historia, qué momento, qué carrera, qué amigo, lo que si sé es que es la misma la que nos ha mantenido tanto tiempo juntos renovándonos agrandando nuestro periplo, anécdotas, amistades, lugares, etcétera.
Por ahora quiero terminar aquí pero trataré de plasmar mas historias en un próximo mail, de hecho, tengo muchos recuerdos que quisiera compartirlos con todos Uds. Y por supuesto también con los hermanos de otras tunas que también nos acompañaron en viajes y encuentros, los quiero mucho, cuídense harto, no veo las horas de volver a ponerme el traje -si me entra- en una próxima ronda, saludos a sus familiares, nuevamente felicitarlos por los logros, su hermano de siempre:
Sir Potito

1 comentario:
oe!! cuelgate una fotito de The Police .... tun turun....
Publicar un comentario